Audaz brasileño surfea la ola más grande del mundo y bate récord mundial

Rodrigo Koxa ganó el Récord Guinness por ser la primera persona en surfear una ola de 24 metros, la más grande del mundo.

El surfista de 38 años también fue galardonado por la Liga Mundial de Surf, con el premio a la Ola Más Grande Quicksilver XXL, por haber montado 24 metros de ola en Nazaré, Portugal.

Según Guinness World Records, el premio Quicksilver se le otorga al surfista que por cualquier medio posible, sea capaz de atrapar y montar la ola más grande del año. Es por eso que Rodrigo no solo consiguió el premio de la liga, sino el récord mundial también.

"He tratado de surfear olas grandes en mi vida y tuve una gran experiencia en 2014, cuando casi morí en Nazaré. Cuatro meses después tuve pesadillas, no viajé, me asusté y mi esposa me ayudó psicológicamente", aseguró Koxa, quien es originario de Guaruja, Brasil.

EL MEJOR DÍA DE SU VIDA

Para Rodrigo, el día que montó esa ola de 24 metros, fue el mejor día de su vida, de acuerdo a la reseña de Independent, que también muestra que Koxa rompió el récord pre establecido por Garret McNamara, quien en 2011 montó una ola de 23.77 metros.

Surfer Today reveló que Rodrigo usó un jet ski conducido por Sergio Cosme, quien le preguntó al brasileño antes de remolcarlo: "Koxa, es una bomba ¿Quieres ir?" a lo que claramente respondió que si.

De acuerdo al portal de surf, McNamara extendió sus sinceras felicitaciones a Rodrigo por haber superado su proeza y además apreció su humildad y su actitud llena de agradecimiento por todo.

LA VIDA SE SURFEA CON BUENA VIBRA

"Cuando Rodrigo vino a Hawaii por primera vez, vivió conmigo en mi casa y compartí experiencias con él por años. Luego vino a Nazaré humilde y agradecido", puntualizó McNamara.

También dijo que Koxa es el ejemplo vivo de la gratitud y de como este rasgo lleva más lejos a las personas de lo que muchos piensan. Y que gracias a su entusiasmo y voluntad es que ha llegado a donde está hoy.

Hoy Rodrigo Koxa está en la cima de su carrera gracias a todo su empeño por hacer cosas que pocos se atreverían hacer. Porque arriesgandose es que los sueños se vuelven realidad y este surfista es prueba de ello.