Desgarradora historia de perrito de terapia abaleado y asesinado por cazador

Una acostumbrada caminata entre los árboles se volvió una trágica experiencia que Valeria Calderoni jamás podrá olvidar.

Su perra de terapia, una Tamaskan llamada Kaoru, murió en sus brazos luego de ser disparada por un cazador que yacía a metros de ellos, en ese bosque de Squamish, Canadá, en septiembre de 2017.

Calderoni, quien es fundadora del centro de rehabilitación Canine Valley, estaba paseando a su perra, junto a una manada de su centro cuando oyó un disparo.

La mujer afirmó que el sonido del arma fue tan fuerte que todo su cuerpo se agachó, y cuando subió la mirada, vio a Kaoru sangrando. Entendió que le habían disparado, relata Global News.

Valeria estima que el cazador estaba a unos seis metros de ellos al momento del incidente, y además, el hombre dijo que creyó que el animal era en realidad un lobo.

"Mi perra es realmente blanca. Ella llevaba un collar. No estábamos solas", dijo Calderoni. "[El cazador] no evaluó la situación".

El accidente ocurrió cerca del lago Lucille, una popular área al norte de Squamish para cazar y para miembros del público en general.

El grupo estaba siguiendo una ruta que el personal de Canine Valley dijo que a menudo seguían sin incidentes.

Kaoru era una perra de terapia certificada que, según Calderoni, era parte de la comunidad Squamish. El gentil can trabajó con niños con autismo y personas que presentan desafíos emocionales.

"Ayudó a miles de personas a sentirse felices y relajadas durante sus muchas horas de trabajo", dijo Calderoni.

La esperanza de Valeria es que se pueda evitar otra tragedia como la de Kaoru haciendo que los cazadores sean más conscientes de los usuarios recreativos en el área porque "nadie merece perder a su mejor amigo".

Calderoni dice que las leyes en el área deben ser cambiadas para proteger al público. Ella dijo que planea presionar al gobierno para que cree una zona sin caza a 400 metros de la carretera entre Squamish y Whistler.

Meses después, a principios de 2018, oficiales de conservación recomendaron levantar dos cargos contra el cazador, bajo la Ley de Vida Silvestre: cazar sin consideración por la vida, la seguridad y la propiedad de otros, y la caza fuera de temporada. Se desconoce si el caso prosiguió.

Esto nos recuerda a cuando un conductor se consiguió a un ciervo en un camino de Fairmount, Indiana, lo llamó y la reacción del animal fue sorprendente.

Chris Frye iba manejando hacia un restaurante para verse con su esposa, pero de repente vio un venadito junto a un Pastor Alemán. Así que decidió bajar la velocidad y llamar su atención desde el vehículo.

Lo que él no sabía, era que el animal actuaría como el propio perrito, dejándose acariciar. ¡Simplemente increíble! Mira el video.