Ardillita incansable no deja que su hermano gatito tenga un momento de descanso

Tommy la ardilla sigue al gato Jack como si fuese su sombra... Una sombra frenética.

Esta pareja de hermanos putativos desmiente por completo el mito que los animales de distintas especies no se la llevan bien. Tommy y Jack son el ejemplo perfecto de que la amistad y el amor no reconoce razas, tamaños, y en este caso, tampoco se detiene ante la necesidad de descanso.

Tommy fue rescatado cuando era un bebecito por Mel y Will, una pareja de humanos que lo notaron cuando estaba huyendo de un par de ardilla grises adultas. El pequeño parecía estar pasando un momento difícil tratando de zafarse del peligro que lo acechaba, según el relato que Will hizo para The Dodo.

Así que el hombre decidió ponerlo a salvo, pero se sorprendió al ver que tan pronto sustuvo a Tommy entre sus manos, este se enrrolló y se echó a dormir. Al parecer se sintió aliviado y protegido, sabía que le peligro había pasado. Los primeros días con su nueva familia, la ardillita solo dormía en las manos de Will.

TOMMY NO ES UNA ARDILLA CUALQUIERA, PERO JACK TAMPOCO ES UN GATO COMÚN

La pareja rápidamente se dio cuenta que Tommy no estaría seguro en un entorno silvestre al ver que su comportamiento no era el típico de una ardilla. Así que decidieron adoptarlo y presentárselo a Jack, un gato al que también rescataron.

Los dos animales conectaron de inmediato ya que ninguno parece portarse como un ejemplar común de sus respectivas especies. Jack y Tommy se hicieron amigos entre juegos, travesuras y mucha diversión; aunque en realidad posiblemente sea gracias a la paciencia de Jack que esta relación creció tanto en tan poco tiempo.

La ardillita es indetenible, vive a un ritmo frenético mientras Jack trata de llevarle el paso. Además de hiperactivo, Tommy tiene la particularidad de no poder sostenerse con sus patas de atrás mientras come. A pesar de la rareza de ambos y del su espíritu incansable de la ardillita, sus dueños no podrían estar más felices de tenerlos en su casa.

"Él debería ser una criatura salvaje, pero decidió ser parte de nuestras vidas. Hay tantas risas en nuestras vidas porque ellos están aquí", compartió Will en entrevista.

TIN-TIN Y TIGER, OTRA DUPLA ARDILLA-GATUNA

Pero esta no es el primer equipo gato-ardilla que viven sus días divirtiéndose por ahí. Tin-Tin, una ardilla roja y un gato de 13 años llamado Tiger se han vuelto inseparables desde que Decan Andersen rescató a la pequeña ardilla cuando apenas tenía un mes de nacida.

Según Daily Mail, Decan encontró a Tin-Tin con una herida grave en el pecho por lo cual se hizo cargo de ella y la incluyó en su familia de mascotas, la cual además de Tiger (quien se escapó por un tiempo), también incluía a su hermana Coco, quien ya falleció.

"Después de que Tiger regresó a casa, comprendió que su hermana había reclamado Tin-Tin y no quería tener nada que ver con él, por lo que quedó bien claro", declaró Andersen.

Luego de la muerte de Coco, Tin-Tin y Tiger se volvieron inseparables, de hecho, se conviritieron en cómplices de travesuras que ejercen una hermosa lealtad entre sí. "Tiger es como un padrastro o un hermano mayor para Tin-Tin, pero también es definitivamente el jefe", concluyó Decan.

Es importante saber qué hacer si como estas personas, te llegas a encontrar un día con una ardillita bebé en tu patio. De acuerdo a The Dodo, el primer paso es asegurarte de que sea un bebé que no puede valerse por si mismo, porque el hecho de que sea pequeño no lo determina.

Si tiene la cola frondosa y un cuerpo como de 15cm, entonces no necesita cuidados extras. Si tiene el bebé tiene heridas es porque probablemente cayó de su nido y necesita encontrar a su mamá, así que es importante mantenerlo cerca del árbol donde cayó pero a salvo, para que su madre pueda hallarlo de nuevo.

Lo importante es ayudar a estas pequeñas criaturas cuando más necesitan de nosotros, de manera que puedan regresar a su entorno natural a hacer su vida de ardillas. Un viejo refrán dice que el buen hijo siempre vuelve a casa, así que nunca se sabe cuando una de estas ardillitas volverá a darte las gracias.