Arantxa Sánchez Vicario y Josep Santacana se olvidan del proceso de divorcio por un día especial

A pesar de sus diferencias, ellos se unieron en honor a su hija y demostraron el amor que siente por la pequeña de 10 años.

El divorcio entre Arantxa Sánchez Vicario y Josep Santacana es un hecho, pero eso no impidió que ambos compartieran un momento familiar en la celebración del décimo cumpleaños de su hija.

El acercamieno de la expareja solo fue para el festejo infantil, realizado en un centro deportivo de Miami.

POSARON JUNTOS

La tenista y su exesposo posaron juntos en algunas fotos, a pesar de que el último año fue de mucha tensión para ambos e incluso protagonizaron algunas peleas.

Sánchez Vicario y Santacana estuvieron casados por un década y tuvieron dos hijos fruto de su unión matrimonial: Una de 10 y uno de 7 años.

Y desde que comenzó su trámite de divorcio, sus dos hijos viven con su madre hace un año, tiempo en el que poco veían a su papá, pero la jueza de familia de Miami que llevaba la custodia, les instó a llegar a un acuerdo por el bien de la familia.

UN MEDIADOR

Debido a la mala relación que ambos tienen, tuvieron que recurrir a un mediador que ayudó a los abogados de ambas partes a llegar a un acuerdo.

Luego de eso, Santacana recoge a sus hijos los miércoles, pernocta con ellos y vuelve a disfrutarlos en fines de semana alternos, desde el viernes por la tarde hasta el lunes por la mañana.

Y de esa manera acordaron la custodia compartida que prevé que aumenten el tiempo que pasan con su padre hasta que sea igual al que están con Aranxta.

UN ALTO A LOS PROBLEMAS

Por tal motivo, para poder festejar en armonía el décimo cumpleaños de su hija, la expareja le dio un alto a sus problemas personales y se concentraron en hacer feliz a sus pequeños.

Lo cierto es que todos están hablando de las fotos de Arantxa Sánchez Vicario y Josep Santacana que resultaron ser una sorpresa para muchos.

Lo impactante de todo es que la escena ocurrió a pocas horas de acudir al juicio de su divorcio.

En el festejo hubo una tarta con el nombre de la pequeña y también unos platos de lo más saludables a base de frutas, que la tenista y su ex prepararon con mimo para la cumpleañera.

En una noticia similar, aunque no se trata de un divorcio de famosos, esta mujer de 43 años y residenciada en Texas encontró una manera bastante diferente de ponerle fin a su matrimonio de 14 años.

Una firma no era suficiente para Kimberly Santleben-Stiteler, quien decidió celebrar su divorcio con una fiesta que culminó en una gran explosión, y aunque muchos esperaban fuegos artificiales, lo que explotó fue su vestido de novia.