Regresa una cartera perdida y recibe 200 toneladas de nabos para pagar costosa cirugía de su hijo

El hombre encontró la cantidad de dinero que le ayudaría en los gastos del hospital de su hijo. Sin embargo, decidió ser honrado y la historia dio un giro inesperado.

Tang Shaolong, un agricultor de Jining, llevó a su hijo a Jinan, capital de la provincia, para tratar una enfermedad en la sangre que requería de un trasplante de médula ósea.

Shaolong era compatible con su hijo, pero no tenía los 400.000 yuanes que costaba la cirugía. Hasta ese momento ya había gastado alrededor de 200.000 yuanes en atención médica.

DINERO ENVIADO POR DIOS

El viernes salió del hospital a la hora del almuerzo y se encontró en la carretera una billetera que contenía 20.000 yuanes en efectivo, tarjetas bancarias, una tarjeta de visita y un permiso de conducir.

"Para ser honesto, al ver tanto dinero, me sentí muy contento", dijo Tang. “Supuse que era Dios, sabiendo que estaba ansioso por el dinero para salvar la vida de mi hijo [y] eso podría ser una ayuda para mí."

No obstante, Shaolong lo pensó mejor y creyó que el dinero al estar cerca del hospital tal vez pertenecía a otra persona que intentaba salvar la vida allí.

HONESTIDAD EN MEDIO DE LA NECESIDAD

Tang regresó la billetera a su dueño, Ding Yilong, un productor de vegetales que le ofreció una recompensa, pero que Tang no aceptó.

"Si fuera mi salario por mi arduo trabajo, lo tomaría (...) Pero acababa de recoger las pertenencias de otras personas y las devolví. No pude aceptarlo."

Los dos hombres se mantuvieron en contacto. Así fue como Ding se enteró que Tang buscaba ayuda para financiar el trasplante de su hijo.

Ding aceptó que no tenía mucho efectivo en su negocio, pero tenía "alrededor de 200 toneladas de nabos en mi almacén y tengo que liquidarlos antes de mayo".

Entonces le propuso a Tang que los vendieran juntos para usar el dinero en el trasplante de su hijo. La historia de ambos apareció en el periódico Qilu Evening News el domingo, y para el martes ya se habían vendido todos los vegetales.

"Si fuera mi salario por mi arduo trabajo, lo tomaría (...) Pero acababa de recoger las pertenencias de otras personas y las devolví. No pude aceptarlo."

a venta de los nabos arrojó alrededor de 500.000 yuanes. Ese dinero era suficiente para realizar el trasplante y salvar la vida del pequeño hijo de Tang.

En una historia relacionada, Jimmy Gilleece estaba decidido a ayudar a su angustiado cliente; y su misión de encontrar la billetera terminó cambiando su vida.

Gilleece, propietario de un bar en Wrightsville, Carolina del Norte, fue contactado el mes pasado por una cliente que estaba desesperada por su billetera perdida. La billetera no solo contenía su identificación y tarjetas, sino que también contenía su anillo de bodas.