Sutiles señales que permiten reconocer un corazón malévolo y malintencionado

Discerninr entre las buenas personas y aquellas que pueden ser una amenaza es algo difícil para todos nosotros. Pero hay algunos indicios que pueden permitirte identificarlos en tu entorno.

Distinguir entre lo correcto y lo incorrecto no es algo sencillo. Necesitamos tener buen criterio Pero discernir entre las personas buenas y las de mal corazón es aún más difícil. De hecho, a muchos nos cuesta comprender que hay gente realmente malvada, y nunca sospechamos en un principio de la gente que conocemos.

Queremos creer que la maldad es algo lejano y abstracto, algo que únicamente existe en televisión y en las noticias, pero no en nuestras vidas. Pero la verdad es que los malvados se aprovechan de esta creencia para introducirse en nuestros círculos más íntimos sin despertar alarmas. Presta atención a estas señales, y aprende a identificarlos.

1. Los corazones malvados son expertos en crear confusión y disputas

Modifican los hechos sutilmente, mienten con facilidad, evitan asumir responsabilidad, niegan la realidad, inventan historias y esconden información.

2. Los corazones malvados son expertos en engañar al prójimo con su verbo locuaz y lisonjas frecuentes

Pero si miras la realidad de sus vidas de cerca, o la forma en la que actúan tras haber hablado, verás que no existe evidencia de cambio ni de crecimiento. Todo es pura apariencia.

3. Los corazones malvados malvados necesitan y exigen controlar a los demás, y suelen ser autoritarios

Rechazan toda retroalimentación, responsabilidad o reglas que sean impuestas por los demás. Interpretan las normas y reglamentos para beneficiarse de ellos, pero rechazan todo lo que exija reflexión y arrepentimiento.

4. Los corazones malévolos abusan de los buenos sentimientos de los demás

Exigen perdón y misericordia, pero jamás la ofrecen. Exigen calidez, aceptación e intimidad de las personas a las que les han hecho daño, sin empatizar con el dolor que causan, y sin mostrar la menor intención de cambiar su conducta o esmerarse por reconstruir la confianza perdida.

5. Los corazones malévolos no tienen consciencia ni remordimiento

No piensan en sus pecados ni transgresiones, y si en algún momento pasan por su mente, les provoca dicha recordarlas. Al mismo tiempo, proyectan una personalidad "noble".

Si conoces a una persona con estas características, es importante que sepas cómo conducirte a su alrededor. Es importante que no cedas ante sus presiones.

Quieren que creas:

1. Que sus horribles acciones no merecen serias o dolorosas consecuencias

Cuando dicen "lo siento", creen que es más que suficiente para deshacer todo el daño de sus acciones. Al ser confrontados, se refugian en disculpas superficiales y negaciones. No se comprometen a hacer el trabajo necesario para reparar situaciones y relaciones.

2. Que hablar como alguien noble es lo mismo que serlo

Este tipo de personas se acostumbran tanto a usar máscaras para esconder su verdadera naturaleza. Lo peor, asumen que las demás personas son iguales, y que la nobleza en los demás es señal de la misma oscuridad que ellos poseen. Es por eso que lo mejor que puedes hacer es alejarte de ellos.

Las suegras son notorias por ser controladoras, críticas y prepotentes. Y como cualquier persona tóxica, una suegra tóxica es un parásito chupador de almas que se alimenta de su miseria. We Have Kids habló sobre ellas.

Para protegerse y proteger a sus seres queridos, necesita conocer a su enemigo, por lo que te tenemos 10 señales de que podrías estar tratando con una suegra tóxica.