Papá se tatuó en el pecho la misma cicatriz que le dejó a su hijo una cirugía de corazón

Luego de que su hijo de seis años fuese sometido a una cirugía de corazón abierto, este genial papá decidió acudir a un artista de tatuajes para hacer sentir más cómodo a su hijo con su cicatriz.

Joey, el hijo de Martin Watts, fue diagnosticado de estenosis aórtica supravalvular, un defecto de nacimiento que se desarrolla antes del parto. Impide el flujo sanguíneo al corazón y al resto del cuerpo. Los padres de Joey supieron de su condición a las 14 semanas.

"No es fácil para un chico de 6 años, o un niño de cualquier edad, tener ese tipo de operación", dijo su madre, Leanne Watts. "Cuando Joey vio la cicatriz, sólo dijo '¿es aquí donde tienen que cortarme para reparar mi corazón?'. Le dijimos que debería ser algo que lo haga sentir orgulloso, que no debe darle pena por lo que le ha pasado".

Joey se sometió a una operación de 8 horas en mayo, y fue dado de alta a los pocos días. Leanne dijo que está recuperándose bien, pero que necesitará más intervenciones en el futuro.

Para ayudar a Joey a lidiar con su nueva marca, Martin se hizo un tatuaje en el pecho que se asemeja a la cicatriz que Joey tiene ahora en su cuerpo. Leanne dijo que el nuevo tatuaje de Martin ayuda a Joey a sentirse mejor sobre lo que ha atravesado.

"Es absolutamente fantástico. Sölo le muestra que no es nada que temer, y que debe estar orgulloso de lo que ha logrado en la vida", dijo. Pero el nuevo tatuaje no sólo ayuda a Joey. El hijo mayor de la pareja, Harley, también tiene una condición y será sometido a la misma operación más tarde este año. A diferencia de Joey, Harley fue diagnosticado en el útero.

"Desde el momento en que nacieron, los doctores dijeron que no había nada que pudieran hacer, tendríamos que vivir con eso", dijo Leanne. "Me dijeron que los dos podían morir en cualquier momento. La condición de Joey progresó rápidamente. Dijeron que si no intentaban algo, lo inevitable pasaría más temprano que tarde".

Pero Leanna tiene esperanzas de que sus niños logren superar sus condiciones.

"Siento alivio por la forma en que los cirujanos en Leeds manejaron las cosas con Joey", dijo. "Será igual de aterrador, pero te dan razones para creer. Pensé que los superhéroes usan capa, pero no, usan batas quirúrgicas".

En otro conmovedor caso, el hermano de 19 años de una paciente se cortó el pelo para que coincida con la cicatriz de su hermana menor después de que se sometió a una cirugía cerebral a principios de este año.

Alana McMullen, de 17 años, y de Mississippi, comenzó a vomitar y sentirse enferma semanas después de la temporada de vacaciones, pero no fue hasta que perdió la audición en el oído izquierdo que los médicos la enviaron a una resonancia magnética. Inside Edition tiene los detalles.